domingo, julio 15, 2012

para ti...

No es difícil decir todo lo que pensé en esos minutos,
 para mi quizas segundos,
 pero creo que la realidad, 
 señalaría que fue más de una hora....
En mi cabeza se creo una de las más dantescas escenas,
 que revivió el dolor,
que algunas de las noches pasadas, 
 experimente...
 mientras ensoñaba con tu muerte. 

Sueños tristes y traidores que hacían pensar, 
 que no eran nada menos que  un turbio puñado de  premoniciones,
 de algo que quizás...
 en la actualidad es el peor de mis miedos, 
perderte....

Hoy aun duele no solo ese duelo del pasado, 
si no que el dolor resuena el en el miedo experimentado,
 que quemo mi alma como lo haría el peor de los pecados,
  pero es que ¡nadie!,  ¡pero nade!,
 repito tiene el derecho de hacer que, si quiera te imagine de esa forma,
 muerto herido, adolorido o tan solo olvidado...

Pero la culpa quemo de igual manera,
 no podía imaginar un mundo donde tu estés en problemas y no poder ayudarte, 
que te sientas solo y luego de horas pierdas las esperanzas de que lleguemos a socorrerte, 
a ayudarte,
 no podía imaginar un mundo donde tu alma no estuviera conectada a la mía,
 y que no fuese como siempre,
 y cada una de las veces, 
 que la vida se me da vuelta en el momento en que se te da vuelta la tuya...

Espero que ese día no llegue nunca, no el de las inevitables despedidas,
 si no el día en que no pueda estar ahí,
 para ti como tu tantas veces haz estado para mi, porque esto es más que sangre,
 de esto se trata la hermandad,  tu eres mi incondicional,
 así como yo se...
Se que en el fondo soy el tuyo, libres y distintos caminos de vida...
 que están  marcados...
...marcados a sangre y a fuego.